Un filósofo muy perro

Hace unos días vino un tal gómezbarbas y nos trajo La escuela de Atenas, de Rafael Sanzio. En él destacaba a un personaje tirado en el suelo y que no sabía quien era. Yo, como buen averroncho que soy, lo he buscado y he dado con él (reconozcámoslo, hay gente gandula y gente trabajadora).
Ese tío que aparece es, nada más y nada menos que,

DIÓGENES DE SINOPE

o El Cínico. Fue un filósofo griego nacido en Sinope en el 412 a. C. y muerto en Corinto en el 323 a. C. Se trasladó a Atenas tras dedicarse a falsificar monedas junto con su padre y fue alumno de un discípulo de Sócrates, Antístenes. Caminaba descalzo durante todas las estaciones del año, dormía en los pórticos de los templos envuelto únicamente en su capa y tenía por vivienda una tinaja. Un día vio como un niño bebía agua con las manos en una fuente: “Este muchacho, dijo, me ha enseñado que todavía tengo cosas superfluas”, y tiró su escudilla. Destaca por su enorme ironía, como podremos ver a continuación:

Frases de Diógenes:

"¡Ojalá, frotándome el vientre, el hambre se extinguiera de una manera tan dócil!". (Diógenes masturbándose en el Ágora tras ser reprendido por unos vándalos)
“Busco un hombre”, (Diógenes buscando a un hombre con una lámpara al mediodía)
"Bípedo implume con uñas planas". (Diógenes dando una definición de "hombre", tras desplumar un pollo delante de Platón)
"Voy, caminando por la vida, sin pausa , pero sin prisa". (Diógenes caminando en una clase de Zenón de Elea, que negaba el movimiento)
"Apártatarte, nene, que me tapas el Sol". (Diógenes respondiendo a Alejandro Magno, que era ¡el rey!)
“Estoy buscando los huesos de tu padre pero no puedo distinguirlos de los de un esclavo”. (Diógenes diciéndole a Alejandro Magno que está buscando a su padre, ya muerto)
"Es lo mismo que trato de hacer a lo largo de toda mi vida" (Diógenes enfrentándose con los ciudadanos)
"Soy un sintecho". (Diógenes tras haberle dado una patada a la tinaja en la que vivía, ya que no tenía nada que hacer)

Muerte de Diógenes:
Es tan misteriosa e intrigante como la de Sócrates. Existen tres teorías:
1ª Diógenes murió tras atragantarse con un pulpo vivo.
2ª Diógenes murió tras el mordisco de un perro al que trataba de dar un trozo de pulpo para comer.
3ª Diógenes murió conteniendo la respiración.
Sus últimas palabras fueron: Echadme a los perros. Ya estoy acostumbrado.”

Si nos ponemos a pensar, llegamos a la conclusión de que tanto Diógenes de Sinope como Pedro de La Felipa comparten ciertas características. Escriban sus reflexiones acerca de esta sospechosa coincidencia aquí abajo, en los comentarios.